Este artista mallorquín, formado en Ilustración y licenciado en Bellas Artes, quiso decir muy temprano experimentar con lo anónimo y lo clandestino. Comenzó su andadura artística en galerías, trabajando en Madrid, Barcelona, Copenhague, Estocolmo, e incluso México. Pero durante su estancia en Berlín cayó rendido ante el arte urbano y se nutrió de su cultura para acabar convirtiéndose en Street artist.
Aguiló admira el compromiso reivindicativo de Banksy, pero su identidad creativa no se asemeja en nada al enigmático artista. Aguiló escoge rincones urbanos donde crea a sus personajes anónimos impregnados de poesía y costumbres. Las personas que imagina, fruto de las raíces más cotidianas, se convierten en el máximo exponente del carácter de la sociedad mallorquina sin caer en el clásico folklore. Personajes sin nombre que existen para despertar las emociones más recónditas de los viandantes.
Aguiló busca contar historias, indagar en las sensaciones, admirar lo más corriente. Como apreciar la sabiduría de la tradición oral de los mayores, tal como plasma en las dos mujeres que charlan tranquilamente en el mural del edificio Beatriu de Pinós de la Universitat de les Illes Balears. También busca despertar emociones a través de la carga emocional de la infancia, como consigue con el niño que se encuentra jugando con sus trenes de juguete frente la estación del Ferrocarril de Sóller en Palma, como si ya se encontrase soñando qué quiere ser de mayor.
Los rincones urbanos preferidos de Aguiló se encuentran en el Casco Antiguo de Palma, donde él ha confesado que encuentra una magia especial.
El artista juega con el papel y otros elementos, en pequeños y grandes formatos. Su arte no busca ser reivindicativo ni complicado de entender, tampoco que su arte quede impregnado eternamente. Aguiló busca atrapar a las personas por un instante, que su arte sea un viaje momentáneo a la memoria. Aunque se caigan a pedazos, sus obras hasta acaban siendo restauradas por otras personas que han quedado hipnotizadas por su presencia. Los mismos observadores se involucran en su cuidado para que sus personajes jamás pierdan la vida.
R: Victoria López